Europa teme que la tercera ola del coronavirus haga acto de presencia nada más acabar las próximas fiestas navideñas, o incluso durante estas, debido a las celebraciones y reuniones sociales, sobre las que las autoridades mantienen diversidad de criterios, lo cual dificulta aun más la puesta en marcha de una actuación común.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) pidió este lunes, ante la proximidad de las Navidades y otras fiestas de fin de año, que se eviten las grandes reuniones familiares y los festejos en lugares concurridos, con el fin de reducir la propagación de COVID-19. «Es recomendable celebrar en casa, evitar reuniones con gente de fuera de ella, y si hay encuentros, preferiblemente deben ser en el exterior, con distanciamiento físico y llevando mascarilla», aconsejó en rueda de prensa el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus.
La pandemia alcanzó este lunes los 62,3 millones de casos, medio millón de ellos registrados en las últimas 24 horas, pero la gráfica de contagios diarios sigue manteniéndose en descenso desde hace dos semanas, de acuerdo con las cifras de la OMS. Los fallecidos en la pandemia ascienden a 1,45 millones, 9.000 notificados en la última jornada, aunque en este indicador aún no se detecta una tendencia descendente clara y se mantienen las altas cifras de la semana anterior.