Los viajes familiares no siempre terminan de la mejor manera, dado que los accidentes siempre son un riesgo que se corre cuando se sale de casa. Caleb Ziegelbauer, de 13 años, fue víctima de una de estas situaciones cuando estaba de viaje en una playa local de Port Charlotte y lo infectó una ameba comecerebros. En ese entonces todo transcurría con normalidad, hasta que cinco días después de las vacaciones, presentó algunos malestares físicos que lo mandaron al hospital.
Todo comenzó el pasado 1 de julio, cuando el menor y su familia estuvieron de visita en el lugar. A los pocos días, Caleb registró dolor de cabeza, fiebre, vómitos y desorientación, razón por la que sus padres lo llevaron al Hospital Infantil Golisano, ubicado en el suroeste de Florida. Los doctores no tenían un buen diagnóstico, ya que le detectaron erróneamente meningitis y lo internaron en la Unidad de Cuidados Intensivos.
De esta manera, con una enfermedad en la que todo instante era valioso, este detalle en la identificación del mal permitió que siguiera avanzando. De acuerdo con la campaña de recaudación en Go Fund Me, todo comenzó con la ameba Naegleria fowleri. “Desafortunadamente, se desperdició un tiempo crucial después de que los médicos le diagnosticaron erróneamente meningitis, lo que retrasó el tratamiento de la ameba, que debe tratarse poco después de la infección para que tenga éxito”, explicó Katie Chiet, tía del paciente.
A pesar de eso, la familia de Caleb mantiene la esperanza de que pueda recuperarse satisfactoriamente, ya que muchas personas con la misma enfermedad pierden la vida antes de llegar al hospital. En este caso, el sobrino de Katie alcanzó a recibir atención médica, por lo que todavía conservan la esperanza.
Al día de hoy, el adolescente continúa internado en el área de terapia intensiva y los daños en su cerebro son inminentes, pero debido a que su tratamiento contra la ameba comenzó el 10 de julio, aún existe una esperanza de vida. “Su resonancia magnética del 20 de julio continúa mostrando daños en su cerebro por la ameba, pero tenemos la esperanza de que pronto dará la vuelta a la esquina y regresará a nosotros”, agregó la tía del niño.
También recalcó que su sobrino ha sido muy fuerte y que, a pesar de que requirió respiración artificial por un periodo de tiempo, ya son varios días en los que logró deshacerse de los aparatos: “¡Requirió un breve período de sedación e intubación, pero ha estado respirando solo durante casi una semana completa!”, destacó.
Noticias 24 Miami