Una extensa investigación del Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ, por sus siglas en inglés) reveló este domingo que 14 líderes mundiales en activo y otros 21 líderes que ya han dejado el poder escondieron propiedades e ingresos valorados en miles de millones de dólares para no pagar impuestos en paraísos fiscales, publica la agencia EFE.
Los archivos filtrados, denominados Papeles de Pandora (Pandora Papers), incluyen a 35 líderes mundiales —todavía en el poder o ya retirados— y a más de 300 funcionarios públicos de todo el mundo que han tenido activos en paraísos fiscales o a través de ellos.
En los Papeles de Pandora figuran, entre otros estadistas, los tres actuales mandatarios latinoamericanos: el presidente de Ecuador, Guillermo Lasso; el mandatario de Chile, Sebastián Piñera y el dirigente de la República Dominicana, Luis Abinader. Además, las filtraciones incluyen a otros altos funcionarios latinoamericanos: 11 mandatarios retirados, 90 políticos de alto nivel y un gobernador de un banco central.
Guillermo Lasso, con vínculos con 10 empresas
En el caso del presidente de Ecuador, la investigación arrojó que tiene vínculos con 10 empresas y fideicomisos offshore, con sede en Panamá y los estados de Dakota del Sur y Delaware, en EEUU: Bretten Trust, Liberty US Trust, Bernini Foundation, Bretten Holdings, Da Vinci Foundation, Fundación Bienes Raíces, Nora Group Investment Corp., Pietro Overseas SA, Positano Trade LLC y Tintoretto International Foundation.
Según anunció, varias de esas empresas no tienen ya existencia y cuando estaban operativas tenían un sustento legal, defendiéndose de las acusaciones.
Binader, implicado también
Al presidente de República Dominicana lo vinculan con dos sociedades panameñas: Littlecot Inc. y Padreso SA, creadas antes de que Abinader asumiera la presidencia del país. El presidente aclaró al ICIJ que Littlecot Inc. posee una propiedad familiar en la República Dominicana, mientras que Padresso SA tiene acciones de otras seis entidades con propiedades y extensiones de la universidad privada perteneciente a su familia.
La investigación de los periodistas determinó que las acciones de estas dos compañías eran inicialmente ‘al portador’, mecanismo que permitió ocultar la identidad de los propietarios de las mismas. En 2018, un abogado de los Abinader reveló los nombres de los hermanos como accionistas de las empresas.
Y en el caso de Sebastián Piñera, la investigación demostró que tuvo vínculo con varias empresas offshore, incluso con sus hijos implicados en el 33% del proyecto minero Dominga. En diciembre de 2010, cuando Piñera ya llevaba nueve meses como presidente, su familia vendió sus valores de la empresa minera al empresario Carlos Alberto Délano, uno de los amigos con los que Piñera se juntaba desde su infancia. La compraventa se efectuó mediante dos empresas fantasmas registradas en las BVI.
La venta se selló con dos actas: una firmada en Chile por 14 millones de dólares y la otra en dicho paraíso fiscal por 138 millones de dólares. El pago debía realizarse en tres tramos, pero con una contingencia: el último pago solo se efectuaría si el Gobierno de Chile no declaraba la zona de operaciones del proyecto Dominga como santuario natural. El Ejecutivo de Piñera decidió no promover la iniciativa medioambiental y, de esta forma, el tercer tramo fue desembolsado.
Noticias 24 Miami