El poderoso movimiento indígena de Ecuador cerró algunas vías y prepara marchas este martes en protesta contra la política económica del gobierno y en abierto desafío al estado de excepción que rige en el país por la violencia del narcotráfico.
Hacia mitad de jornada, el vocero presidencial Carlos Jijón reportó la detención de 18 personas por el bloqueo de carreteras en protestas que consideró de «baja intensidad».
En Zumbahua, en el centro andino, los manifestantes cerraron el acceso a esa localidad con piedras y neumáticos en llamas, según reporteros de la AFP. Mujeres con poncho, picas y palos salieron a la carretera acompañadas de hombres que movieron grandes piedras para obstaculizar el tránsito.
Pese a la advertencia del gobierno de que impediría los bloqueos, no se ha informado oficialmente de choques entre la fuerza pública y los manifestantes.
«Esta convocatoria (la) hemos hecho para rechazar todo lo que está imponiendo el gobierno nacional», dijo a la AFP Julio César Pilalumbo, un líder de Zumbahua, en los páramos de la provincia de Cotopaxi (centro) y de mayoría indígena.
«Vamos a resistir y no vamos a declinar ante ninguna represión», agregó.
Leonidas Iza, presidente de la Confederación de Nacionalidades Indígenas (Conaie), convocó junto a otros sectores como obreros y estudiantes a la protesta que incluye una marcha en Quito el martes por la tarde, sobre la que Jijón dijo que «la fuerza pública va a encargarse de que se respete la ley y el orden».
En la capital ecuatoriana, la policía acordonó la sede presidencial ante el llamado de los grupos de protesta a manifestarse en rechazo a medidas económicas del gobierno conservador, que se instaló en mayo.
«La paralización representa pérdidas económicas para los pequeños negocios, que son el sustento de miles de familias y hogares ecuatorianos. Dile #NoAlParo, por la reactivación y la prosperidad del país entero», tuiteó el presidente Guillermo Lasso.
Descontento y crisis de seguridad
La agitación social volvió a un Ecuador sacudido por el repunte de homicidios y masacres carcelarias, que este año dejan más de 2.000 muertos en este país de 17,7 millones de habitantes, lastrado además por la depresión económica que trajo la pandemia.
La Conaie, que en 2019 también encabezó violentas manifestaciones contra la eliminación de subsidios a combustibles que dejaron once muertos, rechaza las alzas mensuales aplicadas desde 2020.
Noticias 24 Miami