Chug’s Diner, en Coconut Grove, demostró que Miami estaba lista para que alguien se metiera con su comida cubana, publicó El Nuevo Herald.
En 18 cortos meses, el chef Michael Beltrán, un cubanoamericano nacido y criado en La Pequeña Habana, puso mantequilla de maní y jalea en un pastelito, carne de pato en una medianoche y expuso a Miami a lo que quizá sea su mayor ejercicio de confianza: usar café tostado artesanal para el cortadito.
Esta mezcla cubanoamericana fue un éxito, al punto que el público no tardó en desbordar un llamado diner que era poco más que un mostrador con 11 asientos. Chug’s necesitaba crecer y ahora lo ha hecho.
El restaurante cerró para una remodelación completa en noviembre de 2020, se amplió al espacio de al lado y reabrirá el 8 de septiembre como un restaurante completo con 70 asientos en el interior. Seguirá sirviendo versiones de lujo de la cocina cubana, desayunos todo el día y un bar completo para recibir a los noctámbulos hasta las 2 a.m. los fines de semana. Y contará con algo nuevo para la zona: la primera ventanita de café cubano de Coconut Grove.
“Para mí un diner es un lugar que siempre está ahí para la gente de su comunidad”, dijo Beltrán. “Chug’s es la expresión de un restaurante en Miami, una mezcla de culturas. Intentamos ofrecer mucho de eso bajo un mismo techo”.
El corazón del restaurante es todavía su sazón secreta: ingredientes de alta calidad y técnicas de alta cocina para llevar la cocina cubana al límite.
Los giros están en cada plato. Las masitas de puerco son de cerdo Berkshire criado para mejorar su sabor, cocinado con técnica sous-vide, tresdías a baja temperatura, frito al instante y servido con mojo y cebolla. Los Pastelitos, de Gio Fesser, socio de Beltrán (conocido como Pastelito Papi), no solo están rellenos de guayaba y queso, sino de arándanos, mantequilla de maní, y guayaba, relleno de frita cubana, cerdo asado y mucho más. El pan con bistec es más bien un dip francés, servido con jus de rabo de res y alioli de rábano picante.
Los buñuelos y el flan, así como una selección diaria de tartas, pasteles, galletas y brownies, los elabora uno de los mejores pasteleros de Miami, Devin Braddock.