Dave Grohl y Foo Fighters siguieron su concierto de Lollapalooza en Chicago la semana pasada con algunas fechas en Missouri, Kansas y Oklahoma. Una actuación que no se había anunciado anteriormente fue un robusto dedo medio dirigido al grupo de mofetas homófobos que se dedican al odio y que se conoce como la Iglesia Bautista de Westboro, publicó la página de Vanityfair.
Bajo la apariencia de sus alter egos disco, los Dee Gees, Grohl y compañía pasaron junto a los perennes piquetes ding-dongs y lanzaron una portada contundente del éxito asociado con Saturday Night Fever de los Bee Gees, «You Should Be Dancing». (El álbum de The Dee Gees, Hail Satin, que debutó a mediados de julio, es mitad versiones de Bee Gees / Andy Gibb y mitad originales de Foo Fighters en vivo de su reciente álbum Medicine at Midnight).
La Iglesia Bautista de Westboro, con sede en Topeka, que el Southern Poverty Law Center llama «posiblemente el grupo de odio más desagradable y rabioso de Estados Unidos» y la Liga Anti-Difamación dice que «ataca a los judíos, miembros de varias denominaciones cristianas, musulmanes y personas de otras religiones ”, obtuvo reconocimiento nacional en 1998 cuando protestaron contra el funeral del hombre gay linchado Matthew Shepard con letreros y lemas repulsivos.
Aunque la protesta del WBC el jueves no fue muy concurrida, todavía es glorioso ver a estas personas superadas por ritmos funky. También es reconfortante ver a un grupo de rock blanco defendiendo un modo musical que, durante décadas, fue frecuentemente rechazado por la mayoría por su asociación con audiencias homosexuales y artistas de color, lo que incluso llevó a algunos enfrentamientos violentos.
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