El gobernador de Florida, Ron DeSantis, anunció este viernes que el estado demandó judicialmente al Gobierno de Biden para exigirle que permita de inmediato la reactivación de la industria de los cruceros, paralizada desde hace más de un año en los puertos estadounidenses debido a la pandemia del covid-19.
La demanda contra los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) del país y el Gobierno del demócrata Joe Biden busca reactivar esta industria que se siente castigada y en desventaja frente a otras actividades turísticas.
Durante una conferencia de prensa en el Puerto de Miami, DeSantis aseguró que el proceso judicial es a favor «de las decenas de miles de floridanos cuyo sustento depende de la viabilidad de una industria de cruceros abiertos».
«Florida está contraatacando», dijo el republicano.
«En lugar de volar a Miami, gastar dinero para quedarse en nuestros hoteles, gastar dinero en comer en nuestros restaurantes antes de subir al barco, volarán a las Bahamas«, manifestó DeSantis.
El viernes pasado, los CDC actualizaron las medidas que rigen por la pandemia para los cruceros desde puertos de EE.UU., pero mantuvieron la recomendación a la población de no embarcarse por placer.
Entre tanto, la fiscal general de Florida, Ashley Moody, quien dijo que la demanda se presentó este jueves, detalló que el 60 % de los cruceros del país salen de Florida, lo que representa unos 8.000 millones de dólares a la economía estatal.
Los CDC interrumpieron la navegación en puertos del país a partir del 14 de marzo de 2020 y han prolongado la suspensión hasta el 1 de noviembre próximo.
«La industria de los cruceros es esencial para la economía de nuestro estado y mantenerla cerrada hasta noviembre sería devastador para los hombres y mujeres que dependen de las líneas de cruceros para mantenerse a sí mismos y sus familias», expresó DeSantis.