El puerto de Miami (PortMiami) llevará energía eléctrica a los cruceros allí atracados en un esfuerzo por hacer más sostenible el medio ambiente, y se convertirá así en el primer puerto marítimo en el sureste de Estados Unidos en hacerlo, anunció este miércoles la alcaldesa del condado de Miami-Dade, Daniela Levine Cava.
El condado del sureste de Florida firmó una declaración conjunta con seis compañías líderes de cruceros para llevar a cabo el proyecto de suministro eléctrico, que cuenta además con la rúbrica de la empresa proveedora de energía Florida Power and Light (FPL).
«Esta es una gran victoria para nuestro puerto, el medio ambiente y toda la región y el estado de Florida. Estoy muy orgullosa de cumplir con el compromiso de llevar energía desde tierra a nuestra comunidad (de cruceros)», señaló Levine Cava en un comunicado.
Las compañías de cruceros firmantes del proyecto son Carnival, Disney Cruise Line, MSC Cruises, Norwegian, Royal Caribbean y Virgin Voyages.
La firma es un primer y crucial paso para comenzar el proceso de implementación del suministro de energía eléctrica desde tierra a los buques en atraque en PortMiami, indicó el comunicado.
Para su ejecución, la oficina de la alcaldesa convocará a un grupo de trabajo con representantes de cada empresa para «una instalación inicial y, eventualmente, una implementación completa en los próximos años», detalló el condado.
El empresario Philip Levine, exalcalde de Miami Beach y coordinador del proyecto, calificó la iniciativa de «histórica» para Miami-Dade.
«Espero trabajar con el condado a fin de construir un futuro más sólido para nuestra industria de cruceros y trampolín de nuestra recuperación económica, mientras esperamos el regreso seguro de los cruceros en los próximos meses», dijo el empresario.
Según la alcaldesa de Miami-Dade, el objetivo es lograr que PortMiami sea el primer puerto marítimo en el estado de Florida y el sureste de Estados Unidos en proporcionar conexión eléctrica desde la costa.
Queremos «no solo ser la capital mundial de cruceros, sino líderes en sostenibilidad», acotó Levine Cava.
Desde marzo pasado, los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) de EE.UU. suspendieron los viajes en cruceros por la «evidencia» de que «facilitan y amplifican la transmisión» de la covid-19, incluso cuando los barcos navegan con una capacidad de pasajeros reducida.
Según la Asociación Internacional de Líneas de Cruceros (CLIA), la paralización del sector en 2020 debido a la pandemia de covid-19 supuso la pérdida de 77.000 millones de dólares en actividad económica a nivel global, de 518.000 empleos y de 23.000 millones de dólares en salarios.