Alexander Zverev se convirtió en el primer alemán en alcanzar la final del Abierto de EE.UU. en 26 años al derrotar este sábado con una gran remontada al español Pablo Carreño, 27 del mundo, por 3-6, 2-6, 6-3, 6-4 y 6-3 en tres horas y 22 minutos.
En toda su carrera, Zverev nunca había ganado un partido cediendo antes los dos primeros sets, pero esta noche lo consiguió, luchando como hacía su entrenador, el español David Ferrer.
De momento espera ya en la final, la primera de su carrera de un grande, al vencedor del duelo que tendrá lugar a continuación entre el austríaco Dominic Thiem y el ruso Daniil Medvedev.