La zona arqueológica de Teotihuacan, considerada centro vital de la antigua Mesoamérica, fue reabierta este jueves al público con estrictas medidas sanitarias tras casi seis meses de cierre por la pandemia de la COVID-19.
En las ruinas se tomaron acciones para el regreso ordenado de vendedores, trabajadores y visitantes, que únicamente podrán transitar en zonas abiertas debido a que el acceso directo a las pirámides estará restringido.
Este día, la popular zona arqueológica ubicada en el central Estado de México, abrió de las 09.00 a las 15.00 hora local con un aforo permitido de hasta un 30 % de la capacidad.
La capacidad estimada a partir de las estadísticas de visitantes del año anterior, fue de un máximo 3.000 personas, cifra que se seguirá aceptando en las siguientes jornadas.
Para entrar, los visitante portaron cubrebocas obligatorio y se les indicó que en todo momento tenían que guardar sana distancia, es decir, que tendría que existir una separación entre personas de al menos 1,5 metros, con excepción de los niños, que deberán estar acompañados de un adulto.
Además se les tomó la temperatura y se les entregó gel antibacterial en los filtros sanitarios.
Los visitantes solamente pudieron transitar en algunas áreas abiertas, como la mítica Calzada de los Muertos, plazas y explanadas.