Funcionarios de sanidad de EE.UU. afirmaron este miércoles que la posible vacuna contra la COVID-19 estará desvinculada del debate político y rechazaron anticipar una fecha para su distribución al público.
«La ciencia por sí sola será la vía en la que se tome una decisión», aseguró el director de los Institutos Nacionales de Salud, Francis Collins, durante una comparecencia ante el Comité de Salud, Educación, Trabajo y Pensiones del Senado, según recogieron medios locales.
La posible vacuna contra el coronavirus ha quedado en el centro del debate electoral en Estados Unidos, después de que el presidente, Donald Trump, acusara el lunes a sus rivales en los comicios de noviembre, el exvicepresidente Joe Biden y su compañera de fórmula, Kamala Harris, de socavar la confianza del público por motivos políticos.
Trump insistió en que la vacuna estará disponible en un «tiempo récord» y arremetió contra Harris por haber asegurado que no «confiaría» en las promesas del mandatario sobre la seguridad de una vacuna si no van acompañadas de garantías de científicos.