El grupo de expertos de Florida , el segundo estado de EE.UU. con mayor número de casos de COVID-19, recomendó este miércoles al ejecutivo estatal permitir visitas a familiares en asilos de ancianos siempre que se cumplan las medidas de distanciamiento social establecidas y si no surgen casos nuevos en dos semanas.
Tras cinco meses de prohibición de las visitas por orden ejecutiva, los reguladores estatales recomendaron al gobernador, Ron DeSantis, que permita que los asilos de ancianos e instalaciones de vida asistida comiencen a permitir visitas si no han presentado un caso de contagio en un lapso de 14 días.
En Florida, que mantiene su tasa de positivos en las pruebas diarias por debajo del 10 % desde hace exactamente hoy 14 días, las visitas a las cárceles y las residencias de ancianos o centros geriátricos están prohibidas desde marzo.
Entre las directrices recomendadas, las instalaciones deben prever los encuentros siempre al aire libre previo control de temperatura del visitante.
Además, no se permitirán visitas si el residente está en cuarentena o es positivo de la COVID-19, a menos que la visita sea para atención compasiva.
En cuanto a los familiares, se recomienda que deben tener 18 años o más y cumplir con las pautas de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC), entre ellas el distanciamiento social de 1,80 metros (6 pies) y el uso de mascarillas.