Activistas a favor de los inmigrantes protestaron este martes frente a las oficinas del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) de EE.UU. en Plantation, en el sur de Florida, y urgieron parar el traslado de detenidos sin tener en cuenta los protocolos contra la COVID-19, pese al reciente fallo de un juez federal que ordenó seguirlos «de inmediato».
El pasado sábado la jueza Marcia Cooke mostró su indignación por el «incumplimiento» por parte de ICE de las medidas sanitarias contra la pandemia como parte de una demanda colectiva que busca la liberación de todos los inmigrantes detenidos en los centros migratorios de Krome, Broward y Glades, en el sur de Florida.
Organizaciones como Friends of Miami-Dade Detainees o Broward for Progress, entre otras, reclamaron que «liberasen a todos los detenidos» ya que «se siguen incumpliendo las restricciones de las autoridades sanitarias».
Más de una veintena de personas se concentraron a las puertas del ICE en la ciudad de Plantation con pancartas en las que se podía leer: «Todo el mundo libre», «Quiero a mi padre libre y saludable» o «Libertad para los migrantes».
La pelea judicial continúa para estos activistas después de que el pasado abril la jueza ordenara que se redujera en el 75 % la población de estos tres centros por la pandemia, a lo que ICE respondió con trasladados a otros estados, en vez de liberaciones, como le ocurrió a Roberto Martínez.