La mayor parte del estado de Florida entrará este viernes en la segunda fase de reapertura económica, que incluye bares y cines, pese al aumento de los casos de COVID-19 en las últimas 24 horas, que volvieron a superar el millar y ascienden a casi 59.000 desde el pasado 1 de marzo.
El gobernador de Florida, Ron DeSantis, anunció este miércoles que 64 de los 67 condados de Florida entrarán este viernes en la fase dos, de un total de tres, dejando por fuera a Miami-Dade, Broward y Palm Beach, los más afectados por la pandemia, con más de la mitad de los casos.
Esos mismos condados, todos en el sureste, van a un paso más lento y se sumaron más tarde a la fase uno, pero siguen siendo el mayor foco de infección con 31.801 de los 58.764 casos confirmados hasta hoy por el Departamento de Salud de Florida.
«La fase dos no es tan diferente de lo que estábamos ya haciendo», enfatizó DeSantis en una rueda de prensa en Orlando, en el centro de Florida.
La gran diferencia, señaló, son los bares y eventos grandes como los cines y boleras que abrirán a la mitad de su capacidad en 64 condados, mientras que los Gobiernos de Miami-Dade, Palm Beach y Broward necesitarán aprobación para hacerlo.