A los pasajeros que quieren viajar por avión en Canadá, o en vuelos internacionales con destino al país norteamericano, se les tomará la temperatura corporal para prevenir la transmisión de la COVID-19, aunque anteriormente el Gobierno canadiense había señalado que esa medida no era útil.
El primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, anunció la medida este viernes durante su rueda de prensa diaria en la que afirmó que los pasajeros que tengan fiebre no podrán embarcar en su vuelo.
Igualmente, las personas que trabajan en las zonas de seguridad de los aeropuertos serán sometidas a exámenes de temperatura corporal.
La medida para los viajeros procedentes de vuelos internacionales empezará a ser requerida a partir de finales de junio, reveló el ministro de Transportes de Canadá, Marc Garneau.
En los vuelos domésticos, el requisito se implementará más tarde, a finales de julio, cuando el equipamiento necesario esté en funcionamiento en los aeropuertos, añadió Garneau.