El Gobierno de Cabo Verde ha recibido ya la solicitud formal de Estados Unidos para la extradición del empresario colombiano Álex Saab, acusado de ser testaferro del presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, confirmó una fuente del Gobierno caboverdiano.
Saab fue detenido el pasado día 12 en el Aeropuerto Internacional Amilcar Cabral de la isla de Sal (el más importante de Cabo Verde), en respuesta a una petición de Estados Unidos cursada a través de una «alerta roja» de Interpol por delitos de blanqueo de dinero.
La fuente se mostró «un poco preocupada por la politización del caso por los abogados de Álex Saab en la prensa caboverdiana», por temor a que pueda «condicionar la opinión de los tribunales de Cabo Verde, que no aprecian ninguna interferencia política en su acción».
El Ejecutivo caboverdiano -subrayó- ha mantenido una posición de «distanciamiento total en relación con este caso», permitiendo que el Poder Judicial haga su trabajo con independencia.
Aunque se mostró confiada en que la decisión final debería ser favorable a la extradición, la fuente dejó abierta la posibilidad de una sentencia judicial en contra y, en ese caso, Estados Unidos «sabrá comprender» ese fallo porque conoce que en Cabo Verde «los tribunales actúan de manera independiente, sin interferencia del poder político u otros intereses».
Sobre los aspectos diplomáticos del caso, matizó, «Estados Unidos no ha intentado influir en la decisión a su favor», mientras que «la presión de Venezuela ha sido intensa».
Tras la detención del presunto testaferro, Venezuela señaló que Saab es un ciudadano venezolano y un «agente» del Gobierno, que se encontraba «en tránsito» en Cabo Verde para volver al país.