El grupo People for Ethical Treatment of Animals (PETA) pidió este martes a la Fiscalía estatal de Miami-Dade (EE.UU.) presentar cargos de «crueldad animal» contra el Seaquarium de Miami por el cautiverio de la orca Lolita durante casi medio siglo en ese acuario e intervenir para lograr su liberación.
Ingrid Newkirk, presidenta de PETA, se lamentó este martes de que Lolita ha languidecido durante décadas en «un pequeño tanque sin vida real y sin protección contra el abrasador sol».
En una carta enviada a la fiscal estatal de Miami-Dade, Katherine Fernández Rundle, PETA le solicitó investigar la situación del cetáceo que lleva 49 años en el Seaquarium de Miami, de la española Parques Reunidos.
PETA subrayó que Lolita es «atacada por delfines y forzada a realizar trucos para obtener recompensas de peces muertos».
Lolita fue separada de su grupo familiar en 1970, en la zona costera de Puget Sound, en el estado de Washington (noroeste de EE.UU.), cuando contaba con unos 4 años de edad.
Los activistas señalaron en la misiva a la fiscal que Lolita está en un «estrecho tanque de concreto, poco profundo y sin otras orcas no puede participar en un comportamiento natural, como bucear, nadar largas distancias, buscar refugio del sol».