El Gobierno de México anunció este miércoles que el 18 de mayo comenzará un plan de reapertura gradual de las actividades económicas y sociales paralizadas por la pandemia del COVID-19, aunque el presidente Andrés Manuel López Obrador matizó que su aplicación será «voluntaria».
Las autoridades mexicanas ya planean la reapertura del país al considerar que han aplanado la curva de contagios, a pesar de que México registró el martes el mayor número de decesos, 353 en un día, hasta acumular 3.926 muertos y casi 38.000 enfermos por la pandemia.
Este proceso de reapertura será, según expresó el secretario de Salud, Jorge Alcocer, en una rueda de prensa, una transición hacia una «nueva normalidad» que «privilegiará siempre la salud y la vida».
El 18 de mayo se incluirá la construcción, la minería y la industria automotriz dentro de las actividades económicas esenciales, algo que pedía la industria mexicana desde hace semanas para mantener las cadenas de exportación con Estados Unidos.
Ese mismo día, los 269 municipios mexicanos que no han registrado casos de coronavirus SARS-CoV-2 y que son vecinos de zonas sin contagios, la mayoría en el sureño estado de Oaxaca, podrán retomar sus actividades escolares, laborales y el espacio público.
Pero el grueso del plan comenzará el 1 de junio, cuando se activará un semáforo de cuatro niveles que cada semana determinará el grado de reapertura económica y social en cada uno de los 32 estados que conforman el país.