Sesenta personas murieron en Florida a causa del nuevo coronavirus SARS-CoV-2 en las últimas 24 horas, una de las cifras de decesos más altas registradas desde la «reapertura» económica del estado, pero el crecimiento de los contagios fue por el contrario uno de los más bajos, con 379 nuevos casos.
Desde el 1 de marzo hasta hoy 27 de mayo, según el Departamento de Salud de Florida, el estado acumula 52.634 casos confirmados mediante pruebas y 2.319 muertes debido al COVID-19.
En ese periodo las hospitalizaciones han llegado a 9.639 y las pruebas del COVID-19 a 935.271, de las cuales un 5,6 % con resultado positivo, en un estado que tiene 21 millones de habitantes.
Estados Unidos es el país con más casos acumulados de COVID-19 desde que se inició la pandemia. Más de 1,6 millones de personas se contagiaron y más de 99.000 han muerto, según cifras de la Universidad Johns Hopkins.
Después de un mes de confinamiento a nivel estatal, Florida entró el 4 de mayo en la Fase Uno de un proceso de reactivación de la economía, al que se han ido sumando los distintos condados según la incidencia del COVID-19 en sus territorios.
Miami-Dade y Broward, que siguen siendo el foco principal de la enfermedad, con 17.225 y 6.825 casos positivos y 655 y 305 decesos, respectivamente, han sido los últimos en entrar a la «reapertura».