Delta y American Airlines, dos de las principales aerolíneas estadounidenses, anunciaron este martes medidas ante el impacto del coronavirus, incluidas importantes reducciones de sus números de vuelos domésticos e internacionales.
Delta sacará algunos aviones de circulación y reducirá su capacidad hasta un 25 % en rutas internacionales y hasta un 15 % en las domésticas, según informó en un comunicado.
Además, paralizará las nuevas contrataciones y ofrecerá bajas voluntarias a empleados, al tiempo que pospondrá el gasto de unos 500 millones de dólares que tenía previsto efectuar y detendrá su programa de recompra de acciones.
American, por su parte, anunció que recortará un 7,5 % de su capacidad en EE.UU., reduciendo la frecuencia en algunas de sus rutas con más servicio, y un 10 % en los trayectos internacionales durante el verano, cuando más vuelos opera.
«A media que el virus se ha propagado, hemos visto una bajada en la demanda y estamos tomando medidas decisivas para proteger la posición financiera de Delta», explicó el consejero delegado de la aerolínea, Ed Bastian, en un comunicado.