El presidente de EE.UU., Donald Trump, recibió este miércoles en la Casa Blanca a Juan Guaidó, reconocido por más de 50 países como presidente interino de Venezuela, para una reunión a puerta cerrada en la que no se espera el acceso de la prensa.
El encuentro, el primero entre ambos, se produce un día después de que Trump invitara a Guaidó a su discurso sobre el Estado de la Unión ante el Congreso y lo homenajeara como el «legítimo» presidente de Venezuela.
Poco después de las 14.00 hora local, Guaidó llegó al jardín sur de la Casa Blanca en un vehículo negro, acompañado de su delegado para las Relaciones Exteriores de Venezuela, Julio Borges.
Trump, vestido con su característica corbata roja, lo recibió bajo un gran toldo blanco para protegerse de la intermitente lluvia y posó con Guaidó durante unos segundos ante las cámaras, antes de dirigirse con él hacia el interior de la Casa Blanca.
Ambos procedieron entonces hacia el Despacho Oval, donde se esperaba que un grupo pequeño de periodistas y camarógrafos pudiera acceder al inicio de la reunión y escuchar declaraciones de ambos.
Sin embargo, en el último momento, la Casa Blanca decidió cerrar el acceso de los medios a la reunión, algo que desató especulaciones en la sala de prensa sobre la posibilidad de que Trump quisiera evitar las preguntas sobre el inminente voto del Senado para absolverlo de los cargos que enfrenta en su juicio político.
Guaidó se alojó esta noche en la casa reservada para los invitados oficiales de la Casa Blanca, en la que estaba izada este miércoles una bandera venezolana y que estaba rodeada por fuertes medidas de seguridad.