Un joven de 17 años murió tras ser herido de gravedad por un menor de 8 años que, al parecer, accidentalmente disparó un rifle de perdigones dentro del vehículo en que se encontraban ambos, informó la Policía de Tampa (Florida, EEUU).
Los menores, que no han sido identificados por las autoridades estaban esperando a un adulto que estaba retirando dinero en un banco.
El niño, que estaba sentado junto con otro menor de 10 años en la silla trasera, comenzó a maniobrar el rifle de perdigones Daisy 800 y lo descargó accidentalmente, según recogió la Policía.
El hecho ocurrió el pasado 1 de febrero, y el joven murió, según su familia, el pasado día 7 después de permanecer en estado crítico en un hospital de Tampa.
«Nunca como abuela esperaba enterrar a un nieto. Y mucho menos uno de mis hijos», dijo Norine Wafford, la abuela del adolescente, al canal local Bay News 9.