Un llamado por la preservación del medioambiente de los pueblos indígenas y de la cultura en Brasil abrió este domingo los majestuosos desfiles de las escuelas de samba del Grupo Especial, principal atracción del Carnaval de Río de Janeiro, considerado el mayor espectáculo del mundo.
Con una crítica a la ambición desmedida, que pasa por encima de vidas, culturas y del medioambiente, la escuela de samba Estácio de Sá se refirió en su desfile indirectamente a las políticas impulsadas por el Gobierno del presidente de Brasil, el ultraderechista Jair Bolsonaro, que abogan por explotar económicamente la Amazonía para un mayor progreso del país.
La primera de las siete escuelas programadas para desfilar en la noche de este domingo por el Sambódromo de Río escogió a la «Piedra, un viaje en el tiempo» como el tema central de su espectáculo y mostró sus diversas facetas durante su paso por la avenida Marqués de Sapucaí.
El desfile abordó la piedra desde su importancia como narradora de la historia del hombre con los grabados rupestres en los orígenes del mundo hasta la codicia que ha originado el valor comercial de algunas de sus variedades, consideradas preciosas.
La piedra y su papel en la evolución de la humanidad fueron expuestos en seis llamativas carrozas alegóricas, que acompañadas de unos 3.000 participantes con coloridos disfraces, abrieron la noche de desfiles.