El fundador de la plataforma digital WikiLeaks, Julian Assange, acusó este miércoles a Estados Unidos de «abuso de proceso» por presuntamente incumplir el tratado de extradición con el Reino Unido al solicitar su entrega por supuestos delitos de espionaje.
En la tercera jornada de su juicio de extradición en el tribunal londinense de Woolwich, su abogado, Edward Fitzgerald, argumentó que el tratado británico-estadounidense de 2003 «prohíbe expresamente» la entrega por «delitos de carácter político».
Fitzgerald defendió que los cargos, penados con hasta 175 años de cárcel, que EEUU imputa a su cliente -diecisiete relativos a la ley de espionaje de ese país y uno por fraude informático- son «puramente delitos políticos».
Sin embargo, el fiscal James Lewis, en representación de la Justicia estadounidense, adujo que el proceso de extradición se rige no por el tratado de 2003 sino por la ley de extradición británica del mismo año, que no contempla exenciones por delitos políticos.
También sostuvo que los delitos que se imputan al australiano de 48 años son de «criminalidad común» y no políticos.