La OTAN «reposicionará» temporalmente a parte de su personal en Irak a diferentes localizaciones dentro y fuera del país, dentro de las medidas tomadas como precaución para proteger a su personal por la escalada de la tensión tras el ataque estadounidense que mató al general iraní Qasem Soleimaní en Bagdad.
Este cambio llega después de que la Alianza decidiera el sábado suspender temporalmente sus actividades de entrenamiento del Ejército y las fuerzas de seguridad iraquíes, movimientos que enmarca en la protección de su personal en el extranjero.
«Estamos tomando todas las precauciones necesarias para proteger a nuestra gente. Esto incluye el reposicionamiento temporal de parte de nuestro personal a diferentes localizaciones tanto dentro como fuera de Irak», señalaron a Efe fuentes de la Alianza.
La OTAN incidió en que «mantiene una presencia» en el país y está «preparada» para continuar las actividades suspendidas «cuando la situación lo permita».
La organización no aportó más detalles «para proteger la seguridad del personal sobre el terreno», precisó.