Subida salarial, día libre en Nochebuena y baja pagada de 12 semanas para padres y madres son los «regalos» navideños impulsados por el Gobierno del presidente Donald Trump para los empleados federales de EE.UU.
Culmina, de este modo, un tumultuoso año que comenzó con el prolongado cierre del gobierno federal, en medio de las peleas partidistas entre republicanos y demócratas en el Congreso, y lo que le granjeó importantes enfados entre los funcionarios públicos.
El anuncio se produce, además, en el inicio de un año electoral y en el que el presidente Trump buscará la reelección en los comicios de noviembre.
«A nuestra increíble fuerza laboral federal», arranca la orden ejecutiva firmada por Trump en la que se anuncia la subida de los salarios para 2020.
Según los datos del Censo, en EE.UU. hay 2,1 millones de empleados federales.
El alza salarial base será de 2,6 %, cifra que en algunos lugares será algo superior, y supone el mayor incremento en una década para los trabajadores federales en el país.
Los empleados de Washington y Baltimore serán los que registrarán una mayor subida, de alrededor del 3,5 %; seguidos por los de San Francisco y Seattle, que verán aumentados sus sueldos un 3,4 %; y San Diego, Los Ángeles y Nueva York un 3,3 %.