Carlos Alvarado, presidente de Costa Rica, dijo a Efe que su país necesita apoyo internacional para atender el flujo actual de refugiados nicaragüenses que recibe, consecuencia de la inestabilidad política y económica creada por el Gobierno de Daniel Ortega en el país vecino.
«Costa Rica es un país democrático, que respeta los derechos humanos y se precia de tener estabilidad, pero por esto mismo requerimos apoyo internacional frente a una situación tan lamentable como la que ocurre hoy en Nicaragua», destacó Alvarado.
El presidente también transmitió este mensaje en la inauguración el martes del Foro Global de Refugiados en Ginebra, donde recordó que entre 2018 y 2019 Costa Rica, un país de cinco millones de habitantes, ha recibido 75.000 solicitudes de asilo, en su mayoría de Nicaragua, aunque también de naciones como Haití y Venezuela.
«El principal mensaje que queremos dar es que las migraciones y el refugio son una responsabilidad compartida, no son un fenómeno que un sólo país pueda atender, y necesitamos abordarlo de manera conjunta», aseguró.
Alvarado indicó que mientras el éxodo venezolano copa las portadas de los periódicos, el nicaragüense tiende a ser olvidado, aunque a Costa Rica le causa un mayor impacto por su condición de vecino.
«La inestabilidad política y económica del régimen de Daniel Ortega, que ha privado de libertades fundamentales de prensa y de reunión a los y las nicaragüenses, ha puesto en riesgo a muchas personas y ha generado migración hacia Costa Rica, tanto económica como de solicitudes de refugio», aseguró.
El presidente recordó que el número de migrantes en su país ronda el medio millón, cifra equivalente al 10 por ciento de la población, y que las solicitudes de asilo se han multiplicado por ocho este año con respecto al pasado, lo que está generando fuertes presiones.
«Impacta en los sistemas de educación y salud y también en la incorporación efectiva en la sociedad (de los migrantes y refugiados)», indispensable según el presidente «para lograr una cohesión social pacífica y evitar que se despierte la xenofobia».
EFE