Quince países de la Organización de Estados Americanos (OEA) pidieron este martes la convocatoria de elecciones en Bolivia «lo más pronto posible», al mismo tiempo que evitaron calificar de «golpe de Estado» la salida de Evo Morales de la Presidencia del país latinoamericano.
La declaración, una fórmula poco comprometedora y de gran tradición en la OEA, fue respaldada por 15 de los 34 países que son miembros activos del organismo: Argentina, Brasil, Canadá, Chile, Colombia, Costa Rica, Ecuador, EE.UU., Guatemala, Guyana, Honduras, Panamá, Paraguay, Perú y Venezuela, país este último representado por los delegados del líder opositor Juan Guaidó.
En el texto, hicieron un llamado «para que la definición de la Presidencia provisional se efectúe urgentemente y conforme lo estipula la Constitución y las leyes bolivianas y se dé inicio al proceso de convocatoria a elecciones lo más pronto posible».
La declaración fue leída por el embajador de Brasil ante la OEA, Fernando Simas Magalhães, durante una sesión extraordinaria sobre Bolivia del Consejo Permanente de la OEA.