La Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) ha actualizado una Norma Oficial Mexicana (NOM) que busca garantizar la supervivencia de especies como el pasto marino y corales, actualmente amenazados por fenómenos catastróficos como el sargazo y el síndrome blanco.
Tras un proceso de nueve años, el Gobierno mexicano actualizó la lista de especies en riesgo, contenidas en la NOM-059, y en la que ahora se incluyen cuatro especies de pasto marino y dos de coral; todas ellas habitantes del suroriental estado mexicano de Quintana Roo.
De tal suerte, los pastos marinos de manatí y de estrella ahora son consideradas especies amenazadas, es decir, en peligro de desaparecer en corto o mediano plazo.
Mientras que los pastizales caribeño y de tortuga fueron considerados como especies sujetas a protección especial, para propiciar su conservación.
El resguardo es importante si consideramos que en los últimos 17 años se han perdido más de 100.000 hectáreas de pastos marinos en el país a causa del cambio climático, según contó este jueves Tania Cota Lucero, del Centro de Investigación y de Estudios Avanzados del Instituto Politécnico Nacional (IPN).