El secretario de Defensa de Estados Unidos, Mark Esper, confirmó este viernes que su país mantendrá una «presencia reducida» en Siria, que incluiría fuerzas mecanizadas, para evitar que los campos de petróleo vuelvan a caer en manos del grupo terrorista Estado Islámico (EI).
«EEUU mantendrá una presencia reducida en Siria para impedir el acceso del EI a los ingresos del petróleo, como reposicionamiento de la siguiente fase de la campaña en su contra», indicó Esper en una rueda de prensa tras participar en una reunión de dos días de ministros de Defensa de la OTAN.
Esper recordó que «nos retiramos del noreste de Siria» por orden del presidente estadounidense, Donald Trump, una salida que «comenzó con el desalojo de menos de 50 soldados de la zona inmediata de ataque, y ahora estamos en la llamada fase 2 de la retirada».
«En última instancia, siempre tuvimos la intención, como ordenó el presidente, de mantener una presencia», recalcó Esper, quien explicó que «en los últimos días también hemos considerado cómo podríamos reposicionar fuerzas en el área para garantizar la seguridad de los campos petroleros».
Preguntado por qué medidas está tomando EEUU, dijo que «ahora estamos emprendiendo algunas acciones – sin entrar en detalles- para reforzar nuestra posición en (la zona petrolera de ) Deir-el-Zor para garantizar que podemos impedir el acceso del EI a los campos de petróleo».