Un total de 12 líderes de la congregación religiosa Imperial Valley Ministries (IVM) de la ciudad de El Centro, California, fueron detenidos este martes bajo acusaciones de someter a decenas de desamparados, incluidas madres con hijos, a trabajos forzados como pedir dinero en las calles.
Los arrestos se realizaron de manera simultánea en El Centro y en San Diego, en el propio estado, así como en Brownsville, Texas, como parte de una investigación federal iniciada por los delitos de conspiración, trabajo forzoso y fraude, entre otros.
Entre los 12 detenidos, 7 hombres y 5 mujeres, se encuentra el anterior pastor de la congregación, Víctor González. Todos serán presentados mañana ante la jueza Ruth Bermúdez Montenegro, de la Corte federal de El Centro.
Detalles de la acusación formulada por la Fiscalía indican que muchas de las víctimas eran personas en «situación de calle», reclutadas en California y Texas, a quienes la congregación les prometía comida gratis y rehabilitación en caso de consumo de drogas.
En cambio, las personas eran forzadas por los líderes religiosos a mendigar hasta nueve horas diarias, seis días a la semana, así como a entregarles el dinero que recibían a través de programas de asistencia social, señala el documento oficial revelado este martes.
La asociación religiosa tiene alrededor de 30 iglesias afiliadas en Estados Unidos y México, con presencia en ciudades como Los Ángeles (California), Las Vegas (Nevada), Phoenix (Arizona) y Brownsville (Texas).