El nuevo gobernador de Puerto Rico, Pedro Pierluisi, asumió este viernes el cargo pero las dudas aún persiste sobre la pertinencia de que sea el mandatario de la isla, al no haber si ratificado por el Senado, aunque sí por la Cámara de Representantes.
En su primera conferencia de prensa tras acceder al cargo reconoció que existen dudas legales sobre si es pertinente la confirmación de toda la Asamblea Legislativa o basta con que solo lo haga una de las dos cámaras.
Por ello, anunció, que en caso de que el Senado el lunes no lo ratifique, asumiría el cargo la secretaria de Justicia, Wanda Vázquez, segunda en la línea de sucesión.
«Es muy importante que el Gobierno continúe rindiendo sus servicios sin interrupción, por lo que espero contar con el apoyo de todos los funcionarios del Gobierno al ejercer el cargo de Gobernador. El pueblo de Puerto Rico puede estar tranquilo de que su Gobierno está en buenas manos», recalcó.
Además dijo que cuenta con el apoyo de la a Junta de Supervisión Fiscal (JSF), una entidad de control federal creada para afrontar la multimillonaria deuda de la isla, y del Congreso de EE.UU, país del que Puerto Rico es un estado libre asociado.
La renuncia de Ricardo Rosselló se formalizó este viernes tras anunciar el pasado 24 de julio que dimitía tras desvelarse el contenido de un chat privado en el que junto a varios de sus asesores insultaban a varios colectivos como mujeres, LGTB, periodistas, políticos y artistas.