El tratamiento inadecuado y el abuso de los dilatadores pueden disminuir la capacidad pulmonar de los pacientes de asma y afectar su vida cotidiana, afirmó este viernes el médico Dante Hernández, jefe de investigación del Hospital Civil de Guadalajara.
“Con el abuso de los dilatadores el paciente va a tener bronquios con una capacidad pulmonar muy limitada y el problema es que sus actividades cotidianas como subir una escalera o caminar, se van a ver afectadas”, dijo Hernández, un alergólogo que participa en la cumbre de enfermedades respiratorias del 2 y 3 de agosto en Guadalajara (oeste de México).
El dilatador, conocido como salbutamol, propicia que a la larga el bronquio inflame hasta llegar a un proceso “fibrosis” que es una restricción pulmonar por eso los «tratamientos deben ser enfatizados a que este daño no se vaya a perpetuar», indicó.
Advirtió que pacientes que pueden tener una vida productiva y se incrementa el gasto de instituciones públicas o de los seguros de gastos médicos además de un alto consumo de medicamentos liberadores de asma, pero no desinflamatorios.
De acuerdo con la Organización Mundial de Salud, en el mundo hay unos 235 millones de personas con asma, una enfermedad crónica caracterizada por ataques recurrentes de falta de aire que afecta a personas de todas las edades, pero es más común entre los niños.
El organismo internacional estima que cada año mueren 150.000 personas a nivel mundial por complicaciones relacionadas con el asma.
Foto Nuevo Diario