El canciller mexicano, Marcelo Ebrard, negó este viernes que la Guardia Nacional -un cuerpo de seguridad impulsado por el Ejecutivo- haya violado los derechos humanos en sus tareas de control migratorio.
«La Guardia Nacional ha actuado, yo diría, de manera muy, muy clara, muy respetuosa de la ley. No tengo incidentes que lamentar o conocimiento de incidentes que lamentar en contra de derechos humanos de manera grave por parte de la Guardia Nacional», dijo ante los medios.
Y agregó: «esto lo sé, porque yo mismo le hablé al presidente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) para preguntarle».
La respuesta de Ebrard viene luego de que algunas organizaciones hayan expuesto algunas quejas en los últimos meses sobre el comportamiento de elementos de la Guardia Nacional en los albergues migratorios y en su tareas de vigilancia y seguridad.
Reconoció que «hay tres casos» en los que se ha señalado el mal comportamiento de la Guardia.
«Una, porque se acercó a una casa de migrantes; otra, por otra cosa similar; y la otra, que porque estaba la Guardia Nacional entrando a Tapachula, a la Estación siglo XXI», recordó.