Un centenar de personas urgió este martes en Miami al senador republicano Marco Rubio a pronunciarse sobre la detención de menores inmigrantes en EE.UU. si no quiere ser «cómplice» de las condiciones «inhumanas» que enfrentan estos niños y sus familias en busca de asilo en el país.
Un centenar de hombres, mujeres y niños protestaron frente a las oficinas del congresista por Florida y cuatro de ellas, madres de familia, subieron a su oficina a entregarle una carta en la que lo instan a cerrar los «campos de detención de niños».
Jackie Kearns, una de las madres, le dijo a una asistente del senador que «guardar silencio es apoyar» las condiciones que enfrentan estos menores.
«Si Marco Rubio no hace nada al respecto, él está apoyando este tratamiento a los niños», manifestó Kearns.
«Esto es tortura, anti-americano, inhumano y no es lo que nosotros somos (…), el asilo es un proceso legal, sigan el proceso», aseguró por su parte la pediatra Irene Martínez, una de las organizadoras de la protesta.
La movilización hace parte de varias movilizaciones convocadas en el país por diferentes grupos a favor de los inmigrantes y los derechos humanos en oficinas de congresistas y centros de detención para pedir el cierre de estos «campos» que consideran «jaulas para niños».
Rubio, quien según el recepcionista estaba en Washington cuando se llevó a cabo la protesta, señaló este lunes en Twitter que si en las elecciones presidenciales de 2020 es elegido un demócrata, los indocumentados no serán detenidos, se les dará permiso de trabajo y atención médica gratuita, no acudirán a audiencias de inmigración y eventualmente serán elegibles para ciudadanía.