El Chelsea se coronó este miércoles campeón de la Liga Europa al derrotar al Arsenal (4-1) con goles de Giroud, Pedro y Hazard, que decidió la suerte de la final con una gran actuación en la segunda parte con una asistencia y dos tantos, uno de penalti.
La estrella belga comenzó tímido la final, pero mediada la primera parte tomó las riendas del partido y demostró que está preparado para comer en la misma mesa que Messi y Cristiano, y fichar por el Real Madrid.
El equipo dirigido por el italiano Maurizio Sarri, que se jugaba el puesto, impuso su voluntad al español Unai Emery, que había ganado las tres finales de esta competición que disputó como técnico del Sevilla.
Fue el segundo duelo puramente inglés de la historia de la segunda competición europea por excelencia, aunque sólo un futbolista de pasaporte británico salió al campo desde los primeros minutos: Maitland-Niles.
Fue un triste adiós para el portero checo Peter Cech, que salió de titular en el último partido de su brillante carrera, en la que sus mayores éxitos los logró precisamente en las filas del Chelsea.
De no ser por Cech, el Arsenal hubiera recibido un saco de goles, pero eso no fue consuelo para Emery, que ve cómo su equipo se quedó sin Liga de Campeones la próxima temporada.