El número de mujeres con un alto rango en las Fuerzas Armadas de Estados Unidos se ha duplicado desde 2000, según un estudio de la organización Red de Acción de Mujeres en Servicio (SWAN, en inglés) publicado este miércoles en medios de comunicación locales.
Mientras que hace 19 años apenas había 30 mujeres que ostentaban el rango de general o almirante en el Ejército estadounidense, la cifra aumentó a 61 a comienzos de 2018, dice el informe, bautizado como «Mujeres en el Ejército: Dónde nos encontramos».
En 1988, el 4 % de las mujeres que prestaban servicio tenían una graduación, frente al porcentaje muy superior registrado en febrero de 2018 en las cinco ramas de las Fuerzas Armadas existentes en ese momento (actualmente, tras la creación de la Fuerza Espacial, son seis).
De los soldados con graduación a comienzos del año pasado, las mujeres representaban el 20,3 % en la Fuerza Aérea, el 11,8 % en el Ejército de Tierra, el 11,6 % en la Armada, el 8,7 % en la Guardia Costera y el 5,6 % en el Cuerpo de Infantería de Marina, una de las ramas más exigentes el Ejército.