El Gobierno de México reiteró este martes su postura ante la medida unilateral de Estados Unidos de devolver extranjeros solicitantes de asilo para que aguarden en el país latinoamericano su proceso migratorio.
En un comunicado, la Secretaría de Relaciones Exteriores y la de Gobernación explicaron que el Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos informó al Congreso de ese país la extensión de esta medida migratoria que se aplicaba en Tijuana al punto fronterizo entre Mexicali (Baja California) y Calexico (California).
«El Departamento de Seguridad Interior del Gobierno de Estados Unidos informó al Congreso de ese país su decisión de extender la implementación de la sección 235(b)(2)(c) de la Ley de Inmigración y Nacionalidad a la garita fronteriza que comunica las ciudades de Mexicali y Calexico», indicó el comunicado conjunto.
Ambos ministerios informaron que la medida estadounidense conducirá a que, a partir de esta semana, sean devueltos a Mexicali solicitantes de asilo no mexicanos que ingresaron desde México a Estados Unidos.
El Gobierno del presidente estadounidense, Donald Trump, anunció el 20 de diciembre pasado que devolvería a México a los inmigrantes que accedan al país irregularmente por la frontera común, incluidos los solicitantes de asilo, mientras se completan sus procedimientos migratorios en Estados Unidos.
Ante esto, México dijo en diciembre que, en respuesta «soberana», aceptaría y daría atención y protegería los derechos humanos a estos migrantes, incluso con visados de trabajo, en tanto se completa el proceso en territorio estadounidense.