Leopoldo López, opositor venezolano encarcelado desde 2014, propuso a la oposición que se inicie un «debate amplio» que permita definir un «acuerdo nacional» para «reconstruir» Venezuela, según una carta difundida a través de su partido, Voluntad Popular (VP).
«Debemos promover un debate amplio, incluyente y con la urgencia para definir las metas y las prioridades en distintos ámbitos de la vida nacional que nos permitan restituir la vigencia constitucional, la convivencia democrática y promover el bienestar mediante la responsabilidad y el trabajo incluyente», dice la carta de López.
La propuesta de López forma parte de una «ruta democrática» para «recuperar» el voto popular en Venezuela y «salir de la crisis en 2017», y sugirió que el acuerdo que surja del debate sea «sometido a los ciudadanos por medio de una consulta electoral».
Para el opositor, condenado en 2015 a casi 14 años de prisión, no es suficiente identificar el origen de los problemas y sus responsables, sino que, afirmó, se debe definir una meta y orientar una ruta común y unitaria para el nuevo año.
El dirigente propone otros cuatro puntos en su «ruta de acción política», entre ellos continuar el debate iniciado este año para «decidir» sobre la eventual responsabilidad política del presidente Nicolás Maduro en la crisis que atraviesa el país caribeño.
«Una vez instalada la Asamblea Nacional en su nuevo periodo de sesiones, es necesario establecer como primer paso para salir de la crisis, la responsabilidad política, constitucional de la crisis generalizada (…) No tengamos dudas, la Asamblea Nacional tiene toda la legitimidad otorgada por el voto popular», dijo.
También sugirió «recuperar el ejercicio del derecho al voto» que, aseguró, no puede ser revocado, por lo que pide al Parlamento designar de forma «legítima» a los rectores del Poder Electoral.
En el caso de cualquier desconocimiento» por parte del Gobierno a las decisiones que tome la Cámara, López señala que corresponde a la alianza opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) «convocar a los ciudadanos» a organizarse en asambleas de ciudadanos y en «grandes manifestaciones» para apoyar las decisiones del Parlamento.
«Debemos estar claros que el éxito y el cambio solo podrá lograrse con un liderazgo y un pueblo movilizados y presionando a la dictadura», agregó sobre este punto.
Por último, y en sintonía con la idea anterior, el dirigente opositor dice que la coalición opositora debe transformarse de una organización unitaria a una en la que se incluyan «distintos sectores y movimientos».
Pasar «de la mesa» al «movimiento», indicó.
El secretario ejecutivo de la MUD, Jesús Torrealba, aseguró el lunes que el Parlamento, dominado por la oposición, se instalará para su nuevo periodo el 5 de enero a pesar de los «obstáculos» que pueda poner el Gobierno.
Con esto Torrealba hizo referencia a la alerta que dio el presidente de la Comisión de Política Exterior de la Cámara, el diputado Luis Florido, cuando dijo que inició una agenda para informar al mundo sobre la «posibilidad» de que el Gobierno venezolano quiera desconocer al Legislativo en 2017.
Cada 5 de enero se instala y juramenta una nueva directiva del Legislativo por mandato constitucional, pero este año las alarmas se han encendido puesto que el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) ha declarado a la Cámara en desacato y la nulidad de todos sus actos, lo que incluiría la asunción de otra directiva. EFE