Sergio Ramos, capitán del Real Madrid, reiteró el mensaje de su técnico Zinedine Zidane, al dejar claro que no jugarán con el resultado en el duelo europeo frente al Borussia Dortmund, en el, que dijo que su «prioridad es ganar y ser primeros de grupo».
«Como amante del fútbol nos gusta saber los resultados, quien te puede tocar y quien no, pero nuestra prioridad es ganar, ser primeros de grupo y lo que tenga que pasar pasará. Tenemos un partido muy importante, queremos pasar primeros y después a esperar al sorteo. Se verá si nos medimos a un gran rival o de menor nombre», valoró en rueda de prensa.
Después de volver a ser protagonista con otro tanto salvador en los últimos compases de un partido, en el Clásico del Camp Nou, Ramos destacó que lo importante de su labor es defender pero siempre desea volver a marcar goles.
«Soy defensa y debemos intentar mantener la portería a cero. Si después aprovechamos para hacer daño en estrategia, córners o faltas laterales mucho mejor. Llevo toda la vida rematando de cabeza desde enano en la playa con mi padre, de algo ha servido. Si marco gol y en el 90 seria la ostia pero prefiero que el equipo gane y sigamos todos en esta línea», dijo.
Reflexionó sobre ese papel de salvador que se ha ganado con sus tantos en las dos ultimas finales de Liga de Campeones, en la de la Supercopa de España o el Mundial de Clubes.
«Alguien dijo cuanto más trabajo, más suerte tengo y la suerte hay que buscarla. Decían mucho de Raúl que siempre estaba ahí, por el corazón, la fe y la esperanza que nunca hay que perder. Hasta que no pita el árbitro siempre queda una posibilidad de cambiar la actuación. Para el día de mañana me quedan recuerdos bonitos de los últimos minutos y goles para ponerle a mis hijos», reconoció.
La última vez que el Real Madrid disputó un Mundial de Clubes iba igual de lanzado pero tras conquistarlo sufrió un bajón que le costó la Liga y la Liga de Campeones. Ramos mostró que lo tiene muy presente.
«No hace muchos años que pasó, está fresco para tenerlo presente. Somos conscientes que lo del Camp Nou no es para sacar pecho. Queda toda la temporada por delante. Después del Mundialito en enero el equipo pegó un bajón importante. De los errores se aprende y espero que sea un toque de atención para que no vuelva a suceder», deseó.
EFE