La Orquesta Filarmónica de Viena restituirá en las próximas semanas una obra del pintor neoimpresionista francés Paul Signac, expoliada durante el nazismo y que recibió en 1940 como honorario por tocar en la Francia ocupada por los nazis.
Según informa hoy el semanario austríaco Profil, los responsables de la Orquesta han identificado a cinco herederos de Marcel Koch, propietario original de la pintura «Port-en-Bessin», y tiene previsto devolver la obra «de ser posible antes de Navidad».
La portavoz de la orquesta, Claudia Flekatsch-Kapsamer, confirmó hoy en unas declaraciones a Efe en Viena que «se está trabajando para devolver el cuadro en las próximas semanas», aunque no pudo precisar una fecha exacta.
La Filarmónica de Viena había recibido el cuadro del pintor francés, valorado según Profil en medio millón de dólares, de un jefe de la policía secreta en la Francia ocupada por los nazis.
La orquesta encargó en 2013 a una historiadora austríaca que investigara el origen del cuadro para poder devolverlo a los herederos de Koch, quien murió en 1999 sin descendientes directos.
Ahora han sido identificados cinco herederos que, según Profil, se han puesto de acuerdo para subastar el cuadro en París.
La Orquesta Filarmónica de Viena publicó también en 2013 un estudio histórico sobre su pasado en el nazismo.
La mitad de los 123 filarmónicos de la época (de 1938 a 1945) eran militantes del partido nazi, cinco músicos judíos fueron asesinados y otra decena tuvo que huir del país.
La Filarmónica de Viena es protagonista cada primero de enero del famoso Concierto de Año Nuevo, que tuvo su primera edición en 1939 y que el próximo año será dirigido por el venezolano Gustavo Dudamel. EFE