El portero suplente del Chapecoense Jackson Follman, el defensa Helio Neto y el lateral Alan Ruschel continúan en estado crítico, pero estables, según el boletín médico divulgado hoy por el club.
Después de perder una pierna, Follmann, cuyo estado de salud es el más grave, está entubado y requiere de más cuidados.
Neto, el último rescatado, está «clínicamente bien» y «presenta buenas perspectivas de mejora», al igual que Ruschel, que ya consiguió hablar con algunos de sus familiares.
La hermana del lateral, Amanda Ruschel, contó a medios locales que el jugador «está muy agitado» y por ello todavía está sedado.
«Alan se está recuperando, solo que cuando empieza a despertarse se mueve mucho, intenta arrancar los aparatos y por eso continúa sedado. Mi padre dice que habla con él todo el rato. Apretó la mano de mi padre y mueve las piernas», relató la hermana del futbolista.
El periodista Rafael Henzel, que tiene trauma torácico y fractura de pierna, presentó mejoras en un pulmón.
El avión en el que viajaba la plantilla del Chapecoense se estrelló la noche del lunes en el municipio de La Unión, en el Oriente del departamento de Antioquia, cuando se dirigía a Medellín para disputar el partido de ida de la final de la Copa Sudamericana frente al Atlético Nacional colombiano.
En el avión estrellado viajaban 28 dirigentes del Chapecoense, miembros del cuerpo técnico e invitados especiales del club brasileño, así como una veintena de periodistas y nueve tripulantes.
Sólo seis personas sobrevivieron a la tragedia, los jugadores, Henzel y dos miembros de la tripulación. EFE