El descubrimiento este año en EE.UU. de tres cañones, anclas y otros artefactos que podrían ser de «La Trinité» tiene enfrentados a la empresa que los halló en el mar de Florida con los Gobiernos de Francia y de este estado, que aseguran que todo indica que se trata de vestigios del buque de guerra francés.
El hallazgo, considerado «posiblemente el más importante descubrimiento submarino en Norteamérica» por John de Bry, director del Centro de Arqueología Histórica de Melbourne Beach, en el centro de Florida, ocurrió a mediados del año rodeado de cierto secretismo.
El antropólogo, quien no puede ocultar la emoción del hecho «histórico», dijo a Efe que hay muchas señales de que se trata de elementos pertenecientes al buque insignia del capitán francés Jean Ribault, en su deseo de arrebatarle a los españoles la ocupación de la apetecida península de Florida.
El experto señaló que «no tiene para nada sentido» el argumento de Global Marine Exploration (GME), la empresa estadounidense a cargo del hallazgo, que argumenta que los restos pueden ser españoles o ingleses.
La compañía niega la procedencia francesa para proteger la inversión que ha hecho en la exploración, pues bajo las normas de naufragios, EE.UU. reconoce la soberanía de otros países sobre los buques militares hundidos en aguas del país.
Robert Pritchett, su presidente, dijo inicialmente que pensó que habían encontrado uno o dos de los cuatro barcos al mando de Ribault, pero después señaló que cree que eran españoles o ingleses que llevaban artículos franceses.
Sin embargo, Bry explicó a Efe que se trata de «elementos completamente franceses y además corresponden con los que se conoce estaban abordo de la flota del buque francés en 1565».
Bry, quien inicialmente fue contactado por GME debido a su conocimiento de cañones, manifestó que tanto arqueólogos, como historiadores, así como los gobiernos de Florida y Francia, tienen «una opinión diferente» a la de la empresa buscadora de tesoros.
El arqueólogo independiente detalló que se trata de artefactos que pertenecen al reinado de Enrique II de Francia, entre 1547 y su muerte en 1559, y que estaban en la «lista de ‘La Trinité'».
Los elementos son tres cañones de bronce, municiones, un monumento de piedra adornado con las tres flores de lis del escudo de armas francés, similar a otro que hay en un sitio histórico de Florida, anclas y una herramienta de la época, entre otros artefactos.
«Todo esto junto nos indica que estamos lidiando con un naufragio que puede ser francés de 1565», reiteró Bry.
Señaló además que el velero francés no había descargado en Florida porque fueron retados por los españoles al mando del marino Pedro Menéndez de Avilés y tuvieron que huir hacia el sur, donde desaparecieron, presumiblemente a causa de los huracanes.
Por otro lado, agregó, que no se trataba de elementos que iban a llevar a Cuba o regresar a Europa porque los «necesitaban en el Nuevo Mundo».
«Es extremadamente e históricamente importante porque es un evento que no solo poca gente conoce, sino que hubiera cambiado todo en la composición de la región, la gente pudo haber hablando francés en Florida por un tiempo, y también son cuarenta años antes de la llegada de los ingleses a Estados Unidos», manifestó.
Bry espera que estos vestigios no vayan a parar a manos de colecciones privadas y ser dispersados, sino que sirvan para como patrimonio de la humanidad, a cargo de arqueólogos profesionales.
«El público debería tener oportunidad de ver estos artefactos», expresó Bry, quien este año fue a Francia para comparar el hallazgo con cañones de ese país.
Entre tanto, explicó que «nada ha sido tocado hasta que haya una decisión de la corte», pese a la petición de GME de remover las piezas, aún enterradas en la arena en las costas del centro de Florida, en Cabo Cañaveral, en un lugar que no se ha divulgado por completo.
Por ahora, ambas partes en la demanda civil, presentada en octubre pasado en una corte del distrito Central de Florida, en Orlando, deben presentar antes del próximo jueves una moción conjunta relativa a la «custodia sustituta» del hallazgo.
La corte además dio plazo hasta el próximo 20 de enero a los Gobiernos de Florida y Francia para responder a las demanda de GME. EFE