Las autoridades chilenas ordenaron cancelar las medidas de precaución en las cinco regiones del sur de Chile que se vieron afectadas hoy por un terremoto de magnitud 7,6, que no ha provocado víctimas, aunque sí algunos daños materiales.
«Se cancela el estado de precaución; por lo tanto las personas pueden volver a sus hogares de forma tranquila y ordenada», dijo en rueda de prensa el director de la Oficina Nacional de Emergencias (Onemi), Ricardo Toro.
El fuerte movimiento telúrico, que tuvo lugar a las 11.22 hora local (14.22 GMT), se sintió en las regiones de Biobío, La Araucanía, Los Ríos, Aysén y, especialmente, a la de Los Lagos, y obligó a evacuar a unas 4.000 personas.
Minutos después de producirse el fuerte temblor, las autoridades decretaron alerta preventiva de tsunami y la evacuación obligatoria del litoral en las regiones afectadas, pero en vista de la evolución favorable, posteriormente levantaron la alerta de tsunami, así como la prohibición de acercarse a la zona del litoral.
El terremoto tuvo una profundidad de 30 kilómetros y su epicentro se situó a 67 kilómetros al noroeste de Melinka, en la región de Aysén, aunque la localidad más afectada fue Quellón, en la isla grande del archipiélago de Chiloé. EFE