El Gobierno y la oposición venezolana acordaron hoy una declaración conjunta denominada «Convivir en paz», en la que ambos se comprometen a cumplir con la Constitución del país y expresan su «firme compromiso» con una convivencia «pacífica y constructiva» que «destierre la violencia».
El representante del Gobierno Jorge Rodríguez y el de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) Carlos Ocariz leyeron sucesivamente ante los periodistas la declaración conjunta al término de la segunda reunión plenaria de diálogo, que se prolongó por cerca de cuatro horas en un hotel de Caracas.
«Expresamos así los valores y principios que nos obligan en el marco de la Constitución y las leyes de la república. Son principios que compartimos y nos comprometemos a defender», dice el comienzo de la declaración conjunta, que leyó Rodríguez.
El documento señala que ambas partes quieren hablar «al pueblo de Venezuela» no como Gobierno y oposición, sino en «una condición para reconocer y promover el consenso, la de ciudadanos de Venezuela, compatriotas del bien común, que está por encima de nuestras legítimas diferencias».
«Hoy queremos hablar de tolerancia, de derechos humanos, de paz, de prosperidad económica, de soberanía, de felicidad social, porque convivir es respetar, reconocer, forjar vínculos que trascienden un momento histórico y a cualquier circunstancia por difícil que esta sea», afirman.
La declaración señala que ambas partes están comprometidas con con la paz del pueblo, con su bienestar «social, material y moral, con la democracia» por lo que expresan su «firme compromiso con una convivencia pacífica, respetuosa y constructiva porque no hay política ni convivencia en la violencia, ni en la fuerza,(…) ni en el odio, ni en la amenaza, ni en el insulto».
«Nos comprometemos a promover una política respetuosa que destierre, condene y erradique de nuestra sociedad el odio, la justificación de la violencia, la intolerancia y su uso como arma política, el escarnio y el insulto», recalcan Gobierno y oposición.
Asimismo, dicen que con ello quieren «liderar una gran movilización nacional en favor de la concordia, el reconocimiento mutuo y de la paz».
En este sentido, el Gobierno y la MUD hacen un llamamiento a que la declaración sea respaldada por las fuerzas políticas, las instituciones públicas, las organizaciones sociales, los medios de comunicación, las universidades, las comunidades religiosas, los centros educativos y la sociedad en general, según la parte del texto conjunto que leyó Ocariz.
«Nos comprometemos de forma solemne a que nuestras diferencias políticas solo tengan una respuesta en el estricto marco constitucional, un camino democrático pacífico y electoral», aseguran.
También se comprometen a «rechazar cualquier injerencia externa del signo político que sea», así como a un «esfuerzo conjunto intenso y urgente para superar las serias dificultades que atraviesa» la economía venezolana.
Asimismo, ambas partes se comprometen «en el combate frente a la inseguridad ciudadana y la violencia criminal, las bandas paramilitarizadas, grupos violentos, así como la urgencia del desarme de la población».
«En esta hora histórica de nuestra patria estaremos a la altura que merece nuestro pueblo, la historia solo merecerá el respeto de las futuras generaciones si es la historia del reconocimiento mutuo, y es una historia de fraternidad paz, tolerancia y democracia», concluye la declaración conjunta. EFE